Un segundo destructor de la Marina de Estados Unidos ha sido desplegado en el Pacífico, cerca de México, como parte de una estrategia para fortalecer el control operativo de la frontera. Se trata del USS Spruance, un buque de guerra equipado con tecnología avanzada que, en su primera misión en la zona, contribuyó a la captura de una embarcación sospechosa y la detención de 13 personas.
El Comando Norte de EE.UU. detalló que, poco después de zarpar, el Spruance mantuvo contacto por radar con la embarcación y coordinó su intercepción junto con el guardacostas USCGC Forrest Rednour y una unidad de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Este despliegue forma parte de una estrategia de seguridad más amplia que también incluye la presencia del destructor USS Gravely en el Golfo de México. Ambas unidades están diseñadas para reforzar la vigilancia marítima, combatir amenazas transnacionales y apoyar iniciativas de control fronterizo.
El USS Spruance, de la clase Arleigh Burke, cuenta con sistemas avanzados de radar, sensores de última generación, sofisticados equipos de comunicación y dos helicópteros. Está armado con misiles de ataque y defensa, torpedos y un cañón de 5 pulgadas para distintos tipos de enfrentamientos. Además, su tripulación de 350 personas está entrenada en misiones de interdicción marítima, interceptación de embarcaciones sospechosas y operaciones contra el crimen organizado y el terrorismo.
Este buque había sido desplegado previamente en Medio Oriente, participando en misiones contra los hutíes en el Mar Rojo y reforzando la presencia militar estadounidense en la región. Tras su regreso a la Base Naval de San Diego en diciembre de 2024, ahora opera en la Costa Oeste con un nuevo enfoque en la seguridad fronteriza.
