El Senado de Estados Unidos aprobó el viernes un proyecto de ley que aumentará las penas de prisión para los traficantes de fentanilo, una medida respaldada tanto por republicanos como demócratas con el objetivo de frenar la distribución de esta droga mortal. Esta iniciativa, conocida como el Acta HALT Fentanyl, tiene como objetivo combatir la creciente crisis relacionada con el fentanilo, que ha provocado miles de muertes en todo el país.
El proyecto de ley incluye la incorporación permanente de todas las versiones imitadoras del fentanilo —variantes que suelen ser vendidas por traficantes— a la lista de las sustancias más peligrosas de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), conocida como el Programa uno. Aunque estas sustancias ya habían sido temporalmente incluidas en la lista desde 2018, la designación estaba por expirar a finales de este mes, por lo que la medida busca darle continuidad.
Sin embargo, los detractores de la propuesta argumentan que esta acción repite los errores cometidos durante la «guerra contra las drogas», una campaña que resultó en la encarcelación masiva de personas, especialmente de estadounidenses negros, que luchaban contra la adicción. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, la medida también traerá consigo un incremento en las penas por distribuir sustancias relacionadas con el fentanilo.