El Palacio Legislativo de San Lázaro, donde Claudia Sheinbaum Pardo asumirá el cargo como la primera Presidenta de México el 1 de octubre, ha sido reforzado con medidas de seguridad para prevenir manifestaciones y bloqueos a diez días del evento. Este sábado, se instalaron vallas metálicas alrededor del recinto y se implementaron varios filtros de seguridad en las calles adyacentes, controlados por el Resguardo Parlamentario y elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México.
En los próximos días, se prevé que el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional asuman el control de la seguridad en la denominada «zona cero» para el evento protocolario. Los accesos vigilados incluyen las salidas de la estación del Metro Candelaria, así como calles clave como Eduardo Molina, Congreso y Zapata. Las entradas al recinto, como la Puerta 8, el Helipuerto, y otras zonas de acceso como el estacionamiento 3, están bajo estricta supervisión.
El 1 de octubre, además de la presencia de Claudia Sheinbaum y el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador, se espera la asistencia de varios líderes internacionales, entre ellos John Briceño (Primer Ministro de Belice), Luis Arce Catacora (Presidente de Bolivia), Luiz Inácio Lula da Silva (Presidente de Brasil), Gabriel Boric (Presidente de Chile), Gustavo Petro (Presidente de Colombia) y Miguel Díaz-Canel (Presidente de Cuba).
