La Casa Blanca sorprendió este viernes al revelar un nuevo retrato del expresidente Donald Trump, el cual retrata el momento posterior al intento de asesinato que sufrió durante un mitin en julio del año pasado en Butler, Pensilvania. En la imagen, Trump aparece herido en la oreja y levantando el puño al cielo mientras exclamaba “¡Lucha, lucha, lucha!”, gesto que fue ampliamente difundido en su momento.
Lo inusual de este acto no radica solo en la temática del retrato, sino en el hecho de que reemplaza al retrato oficial del expresidente Barack Obama en el vestíbulo del Piso Estatal, un espacio tradicionalmente reservado para los dos expresidentes más recientes. La Casa Blanca confirmó que el retrato de Obama no fue retirado, sino que fue reubicado en la pared opuesta dentro del mismo vestíbulo.
La decisión ha sido interpretada como otra ruptura con el protocolo por parte de Trump, quien ahora ocupa un lugar simbólicamente prominente en la residencia presidencial, pese a su estatus actual como expresidente y aspirante en las elecciones de 2024.
El anuncio se hizo a través de la cuenta oficial de la Casa Blanca en X (antes Twitter), con una fotografía del nuevo retrato acompañada de la frase: “Algo de arte nuevo en la Casa Blanca”, junto a dos emojis de ojos. El gesto, sin precedentes en la historia reciente, ha generado múltiples reacciones tanto en círculos políticos como en la opinión pública.
