Un ataque ucraniano en la ciudad rusa de Belgorod causó la muerte de dos personas, informaron las autoridades el sábado, cuando Rusia afirmaba haber impedido un nuevo intento de saboteadores de cruzar la frontera.
Los ataques del sábado se produjeron cuando los rusos entraban en el segundo día de votación de unas elecciones presidenciales que con toda seguridad prorrogarán el gobierno de Vladímir Putin otros seis años después que aplastara a la disidencia.
Un hombre y una mujer murieron en el ataque y otras tres personas resultaron heridas, explicó el gobernador de la región, Vyacheslav Gladkov, en Telegram. Fue el último de los intercambios de misiles y proyectiles de largo alcance en la guerra rusa en Ucrania.
Otras cinco personas sufrieron lesiones cuando un dron ucraniano impactó contra un vehículo en Glotovo, una localidad a unos 2 kilómetros (1,25 millas) de la frontera ucraniana, apuntó Gladkov.
El Ministerio de Defensa ruso también declaró el sábado que había frustrado los intentos de «grupos de sabotaje y reconocimiento ucranianos» de ingresar a Rusia desde la región ucraniana de Sumy. Esto siguió a una incursión armada reivindicada por opositores rusos al Kremlin con base en Ucrania el martes en las regiones de Belgorod y Kursk.
El Ministerio de Defensa ruso afirmó que las fuerzas militares y de seguridad de Moscú mataron a 30 combatientes al frustrar la última incursión.
El Cuerpo de Voluntarios Rusos —uno de los grupos que afirmaron haber cruzado la frontera el martes y que dicen «luchar por la libertad de los pueblos ucraniano y ruso»— publicó el sábado un video en las redes sociales en que afirmaba haber capturado a 25 soldados rusos.
Otro de los grupos, la Legión de la Libertad de Rusia, advirtió de un «ataque masivo» contra bases militares en Belgorod a última hora de la tarde del sábado e instó a los residentes a refugiarse. Poco después, el Ministerio de Defensa ruso afirmó que las defensas aéreas rusas habían derribado 15 cohetes sobre la región de Belgorod. En los sitios de noticias locales aparecieron vídeos que parecían mostrar humo saliendo de edificios y metralla cayendo. La autenticidad de los vídeos no ha podido ser verificada de forma independiente.
Los ataques transfronterizos en la zona se han producido esporádicamente desde el comienzo de la guerra y han sido objeto de reclamaciones y reconvenciones, así como de desinformación y propaganda.
También el sábado, un dron ucraniano provocó un incendio en una refinería del gigante petrolero ruso Rosneft en la provincia de Samara, a unos 725 kilómetros (450 millas) de distancia de la frontera ucraniana, de acuerdo con el gobernador, Dmitry Azarov. Además se frustró otro ataque contra una refinería, añadió. No se reportaron víctimas.
En un comunicado publicado el sábado por la noche, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy elogió al ejército del país por su nueva «capacidad de largo alcance».
«Lo que nuestros propios drones son capaces de hacer es una verdadera capacidad ucraniana de largo alcance. Ahora Ucrania siempre tendrá una fuerza de ataque en el cielo», publicó en las redes sociales.
Un dron ucraniano también lanzó un explosivo cerca de un colegio electoral en la región ucraniana de Zaporiyia, anexionada ilegalmente, informó la agencia de noticias estatal rusa Tass. No se registraron heridos ni daños.
La ofensiva ucraniana se produjo un día después de un asalto ruso a la ciudad portuaria ucraniana de Odesa causó al menos 21 muertos. Un misil balístico alcanzó una zona residencial de la ciudad sureña, y un segundo proyectil cayó tras la llegada de los equipos de emergencias al lugar, indicaron las autoridades.
Más de 50 personas seguían hospitalizadas, dijo la teniente de alcalde de la ciudad, Svitlana Bedreha, el sábado, según los medios estatales ucranianos.