La reciente reforma aprobada por el Senado de la República, que otorga al Poder Legislativo la facultad de modificar la Constitución sin revisión judicial, representa una amenaza significativa al equilibrio de poderes y a los derechos ciudadanos, según advirtió la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Para la Coparmex, eliminar la posibilidad de que el Poder Judicial supervise las decisiones del Congreso incrementa el riesgo de arbitrariedades y socava la confianza en las instituciones del país, lo que repercute negativamente en la protección de derechos y el crecimiento económico. Ante esta situación, la organización instó a los legisladores de la Cámara de Diputados a actuar con responsabilidad y reconsiderar la reforma.
Coparmex subrayó la necesidad de que el Poder Legislativo escuche las preocupaciones sociales y evalúe el impacto de esta reforma en el desarrollo inclusivo de México. Según la confederación, cualquier modificación constitucional debe respetar los principios de derechos humanos y fortalecer, no debilitar, el marco institucional que sostiene la estabilidad democrática del país.
En su comunicado, Coparmex calificó la reforma como alarmante, no solo por restringir el derecho de los ciudadanos a defenderse ante posibles abusos de poder, sino también por su carácter retroactivo, lo cual, afirmó, violaría el principio de no retroactividad consagrado en la Constitución. Esta medida podría invalidar decisiones anteriores de la Suprema Corte, generando incertidumbre jurídica y afectando la confianza de ciudadanos e inversionistas en el país.
La confederación destacó la importancia de la seguridad jurídica para el desarrollo económico y social, señalando que tanto empresas nacionales como internacionales requieren un entorno predecible para operar y generar empleo. Además, advirtió que la iniciativa impulsada por la mayoría en el Senado elimina la posibilidad de impugnar reformas constitucionales mediante el juicio de amparo, un mecanismo que durante más de 160 años ha sido fundamental para proteger la justicia en México.
Finalmente, Coparmex recalcó que el juicio de amparo es la última línea de defensa contra abusos de poder y debería seguir siendo accesible para todos los ciudadanos. Su eliminación como medio de control judicial, afirmó, no solo pone en riesgo los derechos individuales, sino también la integridad del sistema de contrapesos en el país.