El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó las preocupaciones sobre una posible inestabilidad económica derivada de la reforma al Poder Judicial que está por ser discutida en el Senado. En un evento en Quintana Roo, López Obrador minimizó las especulaciones sobre el impacto económico, argumentando que hasta la fecha no ha habido devaluación del peso durante su administración.
Durante la inauguración del Parque Nacional del Jaguar y Museo de la Costa Oriental, el presidente defendió la reforma, afirmando que busca erradicar la corrupción y combatir la práctica de liberación de delincuentes por parte de jueces. López Obrador sostuvo que la reforma es crucial para evitar lo que él denomina «sabadazos», cuando los jueces ordenan liberaciones de reos durante los fines de semana.
El mandatario también mencionó que su administración ha logrado reducir la pobreza, aumentar los salarios y mantener la estabilidad del peso. Destacó que, si la reforma se aprueba, permitirá a la ciudadanía elegir a jueces, magistrados y ministros, lo que contribuirá a limpiar la corrupción en el Poder Judicial.
La reforma ha generado protestas y bloqueos, incluyendo un paro en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y marchas estudiantiles. La discusión de la reforma también está rodeada de advertencias de organismos multilaterales, entidades financieras y embajadas extranjeras, que han expresado preocupaciones sobre el impacto de la reforma.