La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo expresó dudas sobre la autenticidad de un reportaje publicado por The New York Times que describe la producción de fentanilo en México, señalando inconsistencias importantes en la información presentada. Alejandro Svarch Pérez, director general del IMSS Bienestar, explicó que es imposible producir fentanilo bajo las condiciones descritas en el artículo. Detalló que esta sustancia es extremadamente potente y peligrosa incluso en cantidades mínimas, como 4 o 5 granos de sal, lo que comprometería gravemente la vida de cualquier persona expuesta sin el equipo adecuado. Para su manejo, enfatizó que se necesita un laboratorio especializado con ventilación y medidas de protección avanzadas, lo cual contradice la idea de que pueda sintetizarse en una cocina doméstica.
Armida Zúñiga, titular de Cofepris, destacó que existen regulaciones estrictas para controlar el uso y distribución de fentanilo en México. Desde 2021 hasta 2024, se llevaron a cabo 473 inspecciones a establecimientos relacionados con esta sustancia, resultando en multas por más de mil 600 millones de pesos y la detención de personas implicadas en actividades ilegales. Estas acciones forman parte de un esfuerzo conjunto entre Cofepris, la Unidad de Inteligencia Naval de la Secretaría de Marina y otras dependencias para prevenir el desvío de sustancias químicas controladas.
Durante la conferencia matutina, la Secretaría de Marina (Semar) presentó un análisis detallado del reportaje, cuestionando la veracidad de las imágenes y las afirmaciones hechas por The New York Times. La teniente Juana Peñaloza, química analista de precursores, indicó que las escenas no corresponden a las condiciones necesarias para la síntesis de clorhidrato de fentanilo. Señaló que el uso de una simple bandana como protección, tal como se muestra en el video, es incompatible con los estándares de seguridad requeridos para manejar vapores tóxicos. Además, mencionó que la dinámica criminal descrita en el reportaje, como el cambio de ubicación del laboratorio tras un operativo militar, no concuerda con las prácticas típicas observadas en este tipo de operaciones.
Alejandro Svarch agregó que la fabricación de fentanilo es un proceso complejo que emite vapores altamente tóxicos, lo que hace imprescindible contar con infraestructura adecuada y equipo especializado. Según el funcionario, cualquier intento de producir esta sustancia en las condiciones descritas en el reportaje habría resultado fatal para las personas involucradas en cuestión de segundos. Reafirmó que la narrativa presentada carece de credibilidad y no corresponde a la realidad de los procedimientos necesarios para la síntesis de fentanilo.