Mike Pompeo, quien se desempeñó como secretario de Estado bajo la administración de Donald Trump, expresó que las reformas promovidas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), especialmente la judicial, tendrán consecuencias desastrosas para el país y dañarán las relaciones con Estados Unidos.
En un artículo en The Wall Street Journal, Pompeo advirtió que «los cambios constitucionales y políticos previstos en México impactarán negativamente la relación bilateral con Estados Unidos, generarán caos en la frontera y posiblemente desencadenarán una guerra comercial. Esto resultará en un estancamiento económico en México, beneficiando únicamente a los cárteles de la droga».
Pompeo criticó que López Obrador «parece decidido a implementar una serie de reformas para desmantelar a los reguladores independientes o integrar sus funciones dentro de agencias del Poder Ejecutivo. Esto, violando el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, socavaría la confianza de los inversores en el sistema mexicano y detendría el flujo de inversión extranjera directa desde Estados Unidos».
Señaló que «estas reformas perjudicarán a México, alejarán la inversión y arruinarán las relaciones con Estados Unidos».
Pompeo resaltó un aspecto especialmente preocupante para los inversionistas extranjeros: la propuesta de elegir por voto popular a todos los jueces locales y federales en México, incluyendo a los de la Corte Suprema. Argumentó que esto eliminaría cualquier posibilidad de recursos judiciales justos para los inversores extranjeros en caso de disputas con actores políticos poderosos.
Recordó que el T-MEC está programado para una revisión en 2026, y estas reformas podrían llevar al acuerdo hacia un «desastre». Según Pompeo, el tratado «es crucial para los empleos en Estados Unidos, y si se destruye, China sería el principal beneficiario».
Añadió que «la reforma judicial obstaculizaría los esfuerzos de Estados Unidos en México. Desde 2008, Estados Unidos ha invertido miles de millones de dólares en desarrollar un sistema judicial independiente y competente en México».
Pompeo subrayó que «el plan de AMLO para elegir jueces por voto popular destruiría casi dos décadas de progreso».
Indicó que «esto no funcionaría: el crimen organizado controla un tercio del territorio en México, y un número récord de candidatos fueron asesinados durante las últimas elecciones. La idea de que México puede tener un sistema judicial independiente con jueces elegidos en todos los niveles es absurda y peligrosa».
Finalmente, Pompeo también criticó el poder otorgado por López Obrador a la Guardia Nacional.
«Los votantes mexicanos dieron un amplio mandato a la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum. Los mexicanos, bajo el liderazgo de Sheinbaum, deben intervenir ahora para cambiar el rumbo de su país, y la administración Biden debe defender los intereses de Estados Unidos ayudándolos en este esfuerzo».