El exprocurador del estado de Nayarit, Édgar Veytia, condenado por narcotráfico en Estados Unidos, hizo este martes referencia al expresidente mexicano Felipe Calderón (2006-2012) a quien vinculó de manera indirecta con el narcotráfico, como parte de su testimonio en el juicio que se sigue en Nueva York contra el exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
Según Veytia, que reconoció haber protagonizado una larga carrera de corrupción política, en 2009 fue convocado a una reunión dentro de un vehículo por el entonces gobernador de Nayarit, Ney González, quien le dijo que acababa de llegar de México de una reunión muy importante con el presidente Calderón y García Luna y que «la línea era El Chapo».
Veytia contó que dicho encuentro con el entonces gobernador de Nayarit tuvo lugar en el contexto de la guerra interna del cartel de Sinaloa, entre el clan de los Beltrán Leyva y las facciones afines a Joaquín «El Chapo» Guzmán.
En este sentido, preguntado por la Fiscalía, Veytia dijo que se quedó muy sorprendido tras escuchar las palabras de González y que lo que entendió fue que «debíamos privilegiar a los Chapos y no a los Beltrán como veníamos haciendo».
Sin embargo, Veytia no ofreció más detalles ni habló más con González sobre las circunstancias de dicha reunión o cómo había recibido esas órdenes.
Esta es la primera vez, tras tres semanas de testimonios en el juicio contra García Luna, en que el nombre de Calderón es citado por un testigo.
García Luna sirvió como secretario de Seguridad Pública precisamente en el sexenio de la presidencia de Felipe Calderón.
Y cuando la Fiscalía solicitó a Veytia más datos sobre ese encuentro dentro del vehículo, el exfuncionario se limitó a contestar: «Al gobernador no se le piden explicaciones», y agregó que se retiró tras escuchar sus palabras.
Con su testimonio, Veytia unió este martes a otros testigos convocados por la Fiscalía estadounidense que han vinculado al exsecretario de Seguridad Pública García Luna con el narcotráfico.
Veytia indicó que junto con Roberto Sandoval Castañeda, exalcalde de Tepic y exgobernador de Nayarit, recibió sobornos del clan de los hermanos Beltrán Leyva a cambio de no investigarlos, protegerlos y no inmiscuirse en sus asuntos.
Veytia contó que a finales de octubre de 2008 se reunió con el entonces responsable de seguridad en la ciudad de Tepic, que identificó como el comandante Violante, que le dijo que acababa de participar en una convención nacional de seguridad y que «había recibido instrucciones de Genaro García Luna de que debíamos tomar el lado del Chapo», algo que no hizo.
Poco después, Violante renunciaría a su puesto y Veytia se convertiría en Director de Tránsito de Tepic y encargado de la seguridad pública de la ciudad, que describió como «la segunda ciudad más violenta de México» en aquel momento.