El gobierno actual del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), «no representa ningún cambio», donde los pueblos originarios «siguen siendo objeto de la limosna (esa aspirina para sinvergüenzas), acarreo electoral, curiosidad artesanal y punto de fuga para quienes administran la destrucción en curso: voy a destruir tu vida, es decir tu territorio», declaró el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
En un escrito titulado Décima Parte: Acerca de las Pirámides y sus usos y costumbres. Conclusiones del análisis crítico de MAREZ y JBG», los zapatistas expusieron que el «poder pues es como una enfermedad que mata las buenas ideas y corrompe, o sea que como que enferma a la gente». «Y ahí tienes que una persona que parece buena gente, pues ya con el poder pues se enloquece. O tal vez ya estaba loco y el poder como que le encueró su corazón».
El EZLN arremetió contra «La Mañanera», donde el presidente Andrés Manuel López Obrador, un día dice una cosa y «otro día lo contrario». «Pero, como da paga, pues le aplauden y contentos porque les da unas limosnas que ni siquiera sale esa paga de su trabajo, sino de lo que da la gente trabajadora a los gobiernos con los impuestos, que son como el cobro de piso del crimen organizado».
«Aprendimos a gobernarnos ante malos gobiernos»
En el escrito, los zapatistas hablaron de la creación de las Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas y las Juntas de Buen Gobierno, donde «aprendimos a gobernarnos y así pudimos hacer a un lado a los malos gobiernos y a organizaciones que dizque son de izquierdistas, progresistas y no sé qué tanto». «30 años aprendiendo de lo que es ser autónomo, o sea que nos auto dirigimos, nos autogobernamos».
En estos 30 años, «no ha sido fácil, porque todos los gobiernos que han pasado del PRI, PAN, PRD, PT, Verde y Morena, pues no se (les) acaba su gana de destruirnos».
Pero en este gobierno actual del Morena, «salió eso de que ya nos desaparecimos, o que ya nos huimos, o que ya estamos muy derrotados, o que ya no hay zapatista, que nos fuimos a Estados Unidos o a Guatemala. Pero ya vez, pues aquí estamos. En resistencia y rebeldía».
«Y lo más importante que aprendimos en los Municipios Autónomos Rebeldes es que la autonomía no es teoría, de escribir libros y hacer discursos. Es de hacer. Y lo tenemos que hacer nosotros como pueblos, y no esperar que alguien viene a hacerlo por nosotros».
Los zapatistas expusieron que en el caso de México, «los distintos gobiernos», han preferido ver a los pueblos originarios «como artesanía viva y, a veces, como coreografía a modo».
«Entonces pues tenemos que aguantar los ataques y las chingaderas de los malos gobiernos, de los finqueros, de las grandes empresas, que están dale y dale para probarnos a ver si aguantamos o fácil es que nos caemos en una provocación para acusarnos que decimos mentiras, que queremos también Poder y paga», aseguran.