Un fuerte terremoto de magnitud 7,1 sacudió el martes 7 de enero el Tíbet y áreas cercanas de Nepal, causando al menos 95 muertos en la región tibetana de China. Este sismo destruyó cientos de casas, cubrió las calles de escombros y dejó a muchas personas atrapadas bajo los escombros, mientras decenas de réplicas continuaban sacudiendo la zona afectada.
Los rescatistas, algunos utilizando escaleras y equipos improvisados, trabajaban entre los escombros para buscar sobrevivientes. En las imágenes difundidas por el Ministerio chino de Gestión de Emergencias, se observaba a personas siendo evacuadas en camillas, mientras otros rescatistas caminaban sobre los escombros.
En el Tíbet, al menos 130 personas resultaron heridas, y más de 1.000 viviendas fueron afectadas. Los edificios colapsados también aplastaron vehículos. Mientras tanto, en Nepal, el terremoto fue fuerte, especialmente en el noreste del país, cerca del Everest, pero no se reportaron daños ni víctimas iniciales. El sismo también fue sentido en la capital, Katmandú, donde los residentes salieron a las calles aterrados.
El epicentro del terremoto se ubicó en el condado de Tingri, en una zona sísmica activa donde las placas tectónicas de la India y Eurasia se encuentran. Esta región es conocida por su actividad sísmica, que a veces puede alterar la altura de los picos del Himalaya.
El presidente de China, Xi Jinping, ordenó esfuerzos inmediatos de rescate y ayuda para las víctimas del desastre, y el gobierno destinó 100 millones de yuanes (aproximadamente 13,6 millones de dólares) para la atención de los afectados. Más de 3.000 rescatistas fueron enviados a la zona, y las autoridades continuaron monitoreando las réplicas, que ya sumaban más de 50 en las horas siguientes al terremoto.
El gobierno de China también desplegó medidas de seguridad y evacuación en las áreas cercanas al epicentro, y las operaciones de rescate continúan en la remota región de gran altitud, donde la mayoría de las personas afectadas viven en condiciones difíciles debido a la altura y las condiciones invernales extremas.