Más de 30 agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México llevaron a cabo inspecciones en los hospitales Mónica Pretelini y del Niño, ambos administrados por el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM). Estas acciones forman parte de una investigación en curso relacionada con la muerte de 13 menores debido a un brote de la bacteria Klebsiella oxytoca.
El objetivo principal de estas verificaciones fue revisar expedientes clínicos, entrevistar al personal médico y analizar los procedimientos de distribución de medicamentos en los hospitales afectados. La investigación se intensificó luego de que los fallecimientos, en su mayoría de bebés prematuros y con bajo peso, generaran preocupación sobre posibles irregularidades.
Como medida preventiva, el pasado 4 de diciembre se ordenó la inmovilización de todas las soluciones de nutrición parenteral preparadas desde el 21 de noviembre, debido a la sospecha de que podrían estar vinculadas con la propagación de la bacteria.
El brote no se limita al Estado de México. En Michoacán se han reportado nueve casos, con tres muertes, mientras que en Guanajuato se confirmaron seis casos, con un fallecimiento.
Por otro lado, la empresa Productos Hospitalarios, S.A. de C.V., ubicada en Toluca y señalada como posible origen del brote, continúa operando con normalidad, lo que ha generado inquietud entre las autoridades y la población. La investigación sigue en curso para determinar responsabilidades y evitar nuevos incidentes.