Israel está considerando la creación de un cuerpo gobernante local alternativo en Gaza, según informó el domingo el ministro de Defensa, Yoav Gallant, con la propuesta de un futuro más allá de Hamás, aunque no dio indicios de quiénes podrían ser esos contendientes.
Gallant, miembro del Gabinete de Guerra de Israel, hizo estos comentarios en un momento de incertidumbre en el conflicto de ocho meses. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, enfrenta una creciente presión para aceptar un nuevo cese del fuego propuesto por el presidente estadounidense Joe Biden, mientras que sus aliados de extrema derecha amenazan con derribar su gobierno si lo hace.
Gallant, quien recientemente exhortó al gobierno a trazar un plan detallado de postguerra para Gaza, dijo durante una sesión informativa que «buscamos una alternativa gobernante a Hamás. El borrador incluye aislar zonas, retirar los operativos de Hamás de estas zonas y llevar fuerzas que permitan la formación de una alternativa gobernante».
Con esto, Israel lograría su objetivo de despojar a Hamás de sus capacidades de gobierno y militares, y de lograr el retorno de las personas que Hamás secuestró en su ataque del 7 de octubre, dijo Gallant. Enfatizó que «no aceptaremos el gobierno de Hamás en ninguna fase y en ningún proceso destinado a poner fin a la guerra».
En respuesta a preguntas, un funcionario de defensa israelí dijo a The Associated Press que Gallant espera habilitar zonas aisladas libres de Hamás en Gaza para que se conviertan en «centros de gobierno local» e identificar fuerzas que permitan la formación de un gobierno a largo plazo.
Israel busca «actores locales que no sean hostiles» y Gallant cree que «los palestinos deben gobernar a los palestinos», informó el funcionario. Israel facilitaría envíos de ayuda a estas zonas y las fuerzas locales serían responsables de distribuirla para fortalecer su autoridad. Sin embargo, esta estrategia es difícil y ya ha fallado en el pasado, señaló un experto.
«No he escuchado de ningún participante local que sea lo suficientemente valiente para presentarse como una alternativa a Hamás», dijo Michael Milshtein, un analista israelí de asuntos palestinos en la Universidad de Tel Aviv y exoficial de inteligencia.
Milshtein señaló que la «ilusión» de Gallant representaría una misión suicida para cualquier líder local, ya que Hamás ha amenazado a cualquiera que coopere con el gobierno de Israel.
«Aunque Hamás ha sufrido daños severos en los últimos ocho meses, su influencia sobre el público sigue siendo muy fuerte», añadió.