El Cártel de Sinaloa ha utilizado empresas chinas en un elaborado esquema de lavado de dinero mediante el comercio internacional, según expedientes judiciales de Estados Unidos, consultados por Milenio.
La Administración para el Control de Drogas (DEA) y el Departamento del Tesoro revelaron que células pequeñas, no mayores a 20 personas, envían millones de dólares a intermediarios en China, los cuales son empleados para pagar a empresarios extranjeros que adquirieron mercancía en EU solicitando que los fondos sean depositados a cuentas vinculadas al cártel.
Este tipo de táctica es utilizada por el cártel con la intención de evadir la detección y dejar el menor rastro de los billones de dólares que fluyen anualmente. Sin embargo, una de las células liderada por por Édgar Joel Martínez Reyes, fue identificada por la DEA y detenida por lavado de dinero y facilitar el tráfico de drogas.
Su función era convertir las ganancias de la venta de drogas (fentanilo, metanfetamina, cocaína, heroína y marihuana) de dólares a pesos mexicanos para ingresarlos al sistema bancario sin dejar rastros.
Compraban diamantes y piedras preciosas en el mercado negro de EU y los vendían a joyerías mexicanas legales. Además, vendían dólares al menudeo y depositaban pesos a cambio. También incursionaron en la compra de criptomonedas, depositándolas en billeteras virtuales.
Solo a través de estos métodos, las autoridades rastrearon transferencias y envíos por 2 millones 138 mil dólares, aproximadamente 40 millones de pesos, usando paquetes de efectivo fácilmente transportables en vehículos.