China alimenta la crisis del fentanilo en Estados Unidos al subsidiar directamente la fabricación de materiales utilizados por traficantes para fabricar la droga fuera del país, de acuerdo con un informe publicado el martes por una comisión especial de la Cámara de Representantes.
Investigadores de la comisión dijeron que tuvieron acceso a un sitio web del gobierno en el que se revelan devoluciones fiscales para la producción de precursores específicos de fentanilo, así como otras drogas sintéticas, en tanto esas empresas los vendan fuera de China.
«Mediante sus acciones, como ha revelado nuestro informe, el Partido Comunista chino nos dice que desea que entre más fentanilo a nuestro país», dijo el representante Mike Gallagher, presidente republicano de la comisión especial de la cámara baja. «Desea el caos y la devastación que ha provocado esta epidemia».
En noviembre, los presidentes Joe Biden y Xi Jinping anunciaron la reanudación de la cooperación bilateral antinarcóticos centrada en reducir el flujo de precursores químicos y el tráfico de drogas sintéticas. Pero el informe del Congreso hace dudar que China esté cumpliendo sus promesas.
Los hallazgos del informe fueron publicados el martes como parte de una audiencia donde se examina la función de China en la epidemia de fentanilo en Estados Unidos. La mayoría de muertes por sobredosis en Estados Unidos siguen estando ligadas al fentanilo y otros opioides sintéticos. El barato fentanilo se incorpora cada vez más en otras drogas, frecuentemente sin el conocimiento del comprador.
El gobierno chino no solo subsidia la fabricación de precursores químicos, sino que, según el informe, también ha frustrado investigaciones a fabricantes ilícitos al advertirles a los objetivos que serán investigados cuando los organismos estadounidenses del orden público han enviado una solicitud formal de ayuda. Los investigadores dijeron que muchos agentes federales actuales y anteriores han descrito la notificación a los objetivos, lo cual hace que los mismos modernicen sus operaciones y dificulten la detección de sus actividades.
El exsecretario de Justicia de Estados Unidos, William Barr, dijo a los legisladores en la audiencia del martes que es difícil creer que un país con el sistema de vigilancia más omnipresente del mundo desconozca el enorme tráfico de drogas que ocurre. Dijo que el informe de la comisión «descubrió pruebas persuasivas» de que el gobierno chino no es solo un observador, sino que está «metido hasta las rodillas» en el patrocinio y facilitación de la exportación de precursores de fentanilo.