En Haití, la violencia relacionada con las pandillas alcanzó niveles alarmantes en 2024, con más de 5.600 personas reportadas como asesinadas, según informaron funcionarios el martes. Este número representa un aumento del 20% en comparación con el año anterior, según datos de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU. Además, más de 2.200 personas resultaron heridas y casi 1.500 fueron secuestradas en el mismo período.
Volker Türk, alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, destacó que aunque las cifras no capturan completamente la magnitud de los horrores vividos en el país, reflejan la violencia constante a la que la población se enfrenta.
Entre las víctimas se incluyen dos periodistas y un policía, quienes fueron asesinados cuando hombres armados abrieron fuego contra una multitud reunida en Nochebuena para la reapertura del hospital público más grande del país, que había sido clausurado por la violencia de las pandillas. Además, más de 200 personas, muchas de ellas personas mayores, fueron asesinadas en un barrio controlado por pandillas en diciembre.
La situación en Haití continúa siendo crítica, con esfuerzos internacionales liderados por una misión de paz respaldada por la ONU y liderada por Kenia, que busca contener la violencia de las pandillas, pero la situación sigue empeorando.