Mayo superó a abril como el mes más violento del año, registrando 2,410 asesinatos en el país, con un promedio de 77.7 víctimas diarias, según cifras preliminares de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Este mes también tuvo la cifra más alta de víctimas de homicidio doloso en un solo día, con 104 el 19 de mayo, y el fin de semana más sangriento de lo que va del 2024, con 280 asesinatos del viernes 17 al domingo 19 de mayo, según las estadísticas del reporte diario elaborado por la SSPC basadas en los informes de las fiscalías o procuradurías estatales.
Desde octubre de 2022 no se superaban las 2,400 muertes intencionales en un mes, y mayo de 2024 se perfila como uno de los meses más violentos del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, que concluye en septiembre.
Las víctimas de homicidio doloso aumentaron un 2.5% en mayo en comparación con abril, que contabilizó 2,349 asesinatos, siendo así el segundo mes más violento del año.
De acuerdo con el reporte diario, el estado más violento en mayo, en números absolutos, fue Guanajuato, con 243 asesinatos, y acumuló siete días con más de 10 víctimas de homicidio en 24 horas.
Le siguen el Estado de México con 207 asesinatos; Nuevo León con 180; Baja California con 152; Chihuahua con 146; Michoacán con 140; Jalisco con 138; Morelos con 120; Puebla con 100; Guerrero con 99; y Sonora con 89.
Destaca que Nuevo León, gobernado por el emecista Samuel García, registró un aumento del 37% en las víctimas de homicidio, pasando de 131 en abril a 180 en mayo.
De igual forma, el Estado de México, encabezado por la morenista Delfina Gómez, reportó un aumento del 5%; Chihuahua, 30%; Jalisco, 10%; Guerrero, 15%; Sonora, 3%; Zacatecas, 9%; Puebla, 6%; Quintana Roo, 23%; Sinaloa, 34%; Tamaulipas, 40%; e Hidalgo, 77%.
La Ciudad de México contabilizó 84 asesinatos en cifras preliminares, apenas uno menos que en abril, que fue el mes más violento para la capital.
En mayo, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que hay más asesinatos en el país, pero menos violencia en otros aspectos, y comentó que al llegar al gobierno se encontró con una «realidad catastrófica», lo que lo llevó a apoyarse en las Fuerzas Armadas para diversas tareas.
«No hay más violencia, hay más homicidios que en todo el sexenio, hay menos robos que en los sexenios anteriores, hay menos secuestros que en los sexenios anteriores y delitos del orden federal menos».