Altagracia Gómez, coordinadora del Consejo Empresarial en la administración de Claudia Sheinbaum, afirmó que, independientemente del resultado en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, México trabajará para mantener un T-MEC que beneficie a los tres países participantes.
«Tenemos la responsabilidad de trabajar unidos, sea quien sea el ganador, para alcanzar un acuerdo que favorezca a todos. Respetamos la decisión que tomen los ciudadanos estadounidenses, y por eso el CEO Dialogue fue fundamental. Lo que realmente le da estabilidad al T-MEC es la visión de largo plazo de las inversiones y los actores involucrados. Sin importar quién gane, estamos listos para colaborar y buscar cómo avanzar”, expresó.
Durante su participación en el foro «No Money» organizado por El País y BBVA México, Gómez descartó cualquier impacto negativo en la relación con Estados Unidos si Donald Trump ganara la elección, resaltando que los lazos entre ambos países van más allá de la política.
“La relación México-Estados Unidos es profunda y está fuertemente arraigada. Además del comercio, tenemos casi 40 millones de mexicanos viviendo allá, lo que refuerza aún más los vínculos entre las naciones y sus ciudadanos”, comentó.
Por su parte, Eduardo Osuna, director general de BBVA México, señaló que la integración económica de América del Norte es un proceso irreversible, resaltando las ventajas del bloque norteamericano en productividad y mercados frente a otras regiones.
“Deberíamos profundizar aún más en esta integración, y el año 2026 podría ser una gran oportunidad para revisar aspectos pendientes”, dijo Osuna, advirtiendo que, aunque una elección en Estados Unidos que pueda generar incertidumbre afectaría momentáneamente las inversiones en México, la integración es el camino a seguir para generar una tendencia positiva.
Necesidad de señales claras para inversionistas
Frente a la desaceleración de la economía y los cambios que trae consigo el nuevo gobierno, Altagracia Gómez subrayó la importancia de comunicar con claridad los planes de inversión y desarrollo para la administración actual.
“Se deben enviar mensajes firmes antes de diciembre sobre los planes y el rumbo en áreas clave como energía, particularmente en cuanto al plan nacional de energía y la claridad en las reglas para las inversiones privadas, que se esperan representen el 46% en generación de energía renovable”, apuntó.
Gómez añadió que en breve se presentarán proyectos de coinversión público-privada en infraestructura, con el objetivo de atraer más inversión y fomentar el crecimiento, aprovechando oportunidades como el nearshoring.
Osuna opinó que, para que el país crezca a un ritmo superior al histórico 2%, se necesita una inversión sostenida equivalente al 25% del PIB, involucrando tanto al sector público como al privado.
“Hay proyectos listos. La única manera de realizarlos es a través de asociaciones estratégicas entre el gobierno y el sector privado. Es fundamental que enviemos señales positivas y mostremos que los proyectos están en marcha, pues esto impulsará el crecimiento en México”, concluyó.