Luego del asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz —integrantes del equipo cercano de Clara Brugada, jefa de Gobierno de la Ciudad de México— legisladores de Morena y del Partido Verde manifestaron su repudio a este crimen y aseguraron que el movimiento de la Cuarta Transformación no negociará jamás con grupos delictivos.
Alfonso Ramírez Cuéllar, vicecoordinador de Morena en la Cámara de Diputados, expresó su confianza en que las autoridades llevarán a cabo una investigación profunda que incluya posibles vínculos con el crimen organizado. Subrayó que Morena no contempla treguas ni pactos con criminales y que la lucha contra la impunidad será total.
“Que les quede claro: jamás vamos a pactar con los delincuentes. Nuestra prioridad es garantizar la seguridad de la ciudadanía, incluso si eso nos cuesta la vida. Vamos a ir hasta el fondo”, afirmó el legislador zacatecano.
Ramírez Cuéllar también señaló que los índices delictivos en la capital han disminuido gracias a una política frontal contra los grupos criminales. “En esta ciudad no hay cabida para la impunidad; todos los cárteles han sido enfrentados sin distinciones, y esa firmeza ha dado resultados”, sostuvo.
Por su parte, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín, del Partido Verde, consideró que el doble homicidio podría estar relacionado con represalias por los avances del gobierno capitalino en la captura de líderes criminales. A pesar de ello, afirmó que ni el gobierno ni el movimiento de la 4T retrocederán.
“El crimen organizado debe entender que no nos van a intimidar. Esta es una decisión colectiva del pueblo de México: vivir en paz. Y es responsabilidad del gobierno responder con firmeza. No hay espacio para el miedo ni para dar un paso atrás”, aseveró Ramírez Marín.
Ambos legisladores lamentaron profundamente la pérdida de Guzmán y Muñoz, y reiteraron su llamado a mantener la lucha por la justicia y la seguridad, sin dar lugar a la impunidad ni a la presión de los grupos delictivos.
