Cinco pacientes en cuidados intensivos murieron tras quedarse sin oxígeno en un asalto de tropas israelíes al principal hospital del sur de Gaza, una irrupción que desató el caos entre cientos de heridos, médicos y personal del hospital, informaron autoridades sanitarias el viernes. Los soldados registraban el complejo donde, de acuerdo con el ejército Israel, podrían estar los restos de rehenes secuestrados por Hamás.
La incursión se produjo luego que las tropas sitiaron el hospital Nasser, en la ciudad sureña de Jan Yunis, en que el personal, pacientes y otras personas que se refugiaban en su interior hicieron frente al intenso fuego y a la escasez de suministros, incluyendo comida y agua. El ejército israelí informó que había detenido a docenas de personas en las instalaciones, entre ellas algunas que presuntamente estaban involucradas en el ataque de Hamás contra Israel del 7 de octubre.
El viernes, un hombre abrió fuego en una parada de autobús en una concurrida intersección en el sur de Israel, matando a dos personas, antes de ser abatido a tiros.
Las fuerzas de seguridad israelíes llegaron a la casa de un palestino en Jerusalén que previamente había sido identificado en las redes sociales como vinculado al ataque.
Las negociaciones para un alto al fuego en Gaza parecen haberse estancado y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu rechazó el viernes la visión de Estados Unidos para después de la guerra.
“Si otros países reconocen unilateralmente un Estado palestino, se dará “una recompensa al terrorismo”, agregó.