Juan Pablo “N”, alias “El Chuki”, presunto piloto aviador al servicio de “Los Chapitos”, facción del Cártel de Sinaloa, fue vinculado a proceso por su probable participación en delitos de delincuencia organizada relacionados con el tráfico y fabricación de armas de fuego.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), el juez de control adscrito al Centro de Justicia Penal Federal de Hermosillo, Sonora, determinó imponerle prisión preventiva justificada, por lo que permanecerá recluido en el penal federal número 11, ubicado en esa misma entidad.
La FGR detalló que se presentaron pruebas suficientes para acreditar la presunta responsabilidad de “El Chuki” en la introducción clandestina de armas, municiones, cartuchos y explosivos al territorio nacional, así como en la fabricación de dichos materiales sin contar con los permisos correspondientes. Además, se le atribuye un papel de dirección o administración dentro de la estructura criminal.
La captura de Vargas Báez —nombre completo de “El Chuki”— ocurrió durante un operativo en el municipio de Badiraguato, Sinaloa, donde participaron elementos del Ejército, la Guardia Nacional, la Marina, la FGR y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Autoridades federales señalaron que el detenido formaba parte de una red encabezada por Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”; Iván Archivaldo Guzmán Salazar; y Julio César Chávez Jr., dedicada al tráfico de armas provenientes de Arizona, Estados Unidos, hacia México.
Con esta vinculación, la FGR mantiene abiertas varias líneas de investigación sobre la estructura logística de “Los Chapitos”, enfocándose en la red aérea utilizada para el traslado y distribución de armamento en distintos estados del país.