El senador Emilio Álvarez Icaza ha acusado al gobierno federal, Morena y sus aliados en el Congreso de orquestar un «golpe de Estado técnico» contra la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández.
Durante la discusión sobre la reforma judicial propuesta por el presidente, en la sesión de la Comisión Permanente, el senador opositor afirmó que si el presidente Andrés Manuel López Obrador recibiera el mismo trato, Morena estaría «profundamente indignado».
Álvarez Icaza subrayó que la victoria electoral del pasado 2 de junio no otorgó al partido gobernante el derecho de hacer modificaciones constitucionales sin el apoyo de otras fuerzas políticas.
«El mandato popular permitió la continuidad de este gobierno, pero no les dio el respaldo necesario para reformar la Constitución de manera unilateral. Obtuvieron el 54 por ciento, que refleja la voluntad popular expresada en las urnas, y por ello es necesario considerar las diversas perspectivas del país y llegar a un acuerdo de Estado.
«No es cierto que el mandato popular incluya automáticamente la reforma constitucional. En respeto a esa voluntad y al pacto democrático, se debe construir una visión de Estado», añadió.
«Expreso mi total apoyo y solidaridad con la ministra Piña. Se está gestando un golpe de Estado dentro y fuera del Poder Judicial, y aunque no todos estén de acuerdo, es crucial debatirlo. Una figura de su talla no debería ser sometida a discusiones políticas, es peligroso», enfatizó.
La diputada panista Norma Jiménez Angulo también defendió a la ministra Piña, describiéndola como una «mujer de Estado» que ha sido presionada por su defensa de la independencia del Poder Judicial, asegurando el respeto a la Constitución y las leyes.
Jiménez Angulo criticó a la ministra Yasmín Esquivel por presionar a la presidenta de la Corte, señalando su falta de calidad moral debido al plagio de su tesis.
«Desde esta tribuna condenamos que haya voces dentro de la Suprema Corte que intentan golpear a la ministra presidenta, especialmente cuando una de esas voces carece de legitimidad y moralidad. Ella aún debe explicar al pueblo de México sus actos de plagio».
Añadió que atacar a la Corte representa un golpe fatal a la República, la división de poderes y el estado democrático, conduciendo a la instauración de una autocracia en México sin controles ni contrapesos institucionales.
La diputada de Acción Nacional exigió respeto a la independencia judicial y pidió a Morena y sus aliados que permitan que la reforma judicial se realice conforme al proceso legislativo y no a través de medidas improvisadas.
Por su parte, el diputado del Partido del Trabajo, Gerardo Fernández Noroña, desestimó las acusaciones de la oposición, calificándolas de «inventos».
«Ahora nos acusan de querer la renuncia de Norma Piña. Me pregunto, ¿para qué la queremos fuera si su mandato ya está próximo a concluir? El 2 de junio, el pueblo determinó la renovación del Poder Judicial y ella puede ser candidata nuevamente. El Poder Judicial puede proponer hasta 10 candidatos, si no me equivoco, para integrar la Suprema Corte.
«Si el pueblo vota por ella, puede regresar a la Corte y ser ministra nuevamente por nueve años.
«¿Cuándo hemos pedido su salida? Hemos señalado que toma decisiones políticas disfrazadas de jurídicas. No nos acusen de estar orquestando un golpe de Estado», concluyó Fernández Noroña.