El presidente de Corea del Sur arremetió el viernes contra el Norte por lo que calificó de régimen represivo y prometió lograr una península coreana libre y unida, semanas después de que Kim Jong Un rechazase la idea de una reunificación pacífica y amenazó con ocupar el Sur en caso de guerra.
Yoon Suk Yeol habló con motivo del Día del Movimiento por la Independencia del Primero de Marzo, que conmemora el levantamiento coreano de 1919 contra el mandato colonial japonés.
“Ahora debemos avanzar hacia una Península de Corea libre y unificada”, afirmó Yoon en un discurso televisado. “El régimen norcoreano depende únicamente en las armas nucleares y los misiles mientras atrapa a sus 26 millones de habitantes en un lodazal de miseria y desesperación”. “La unificación es precisamente lo que se necesita para expandir los valores universales de libertad y derechos humanos”, agregó el presidente surcoreano. “Nuestros esfuerzos de unificación deben convertirse en una fuente de esperanza y en un faro de luz para el pueblo de Corea del Norte”.
Las declaraciones contradictorias de Yoon y Kim sobre la unificación se producen en pleno repunte de las hostilidades en los últimos años, en los que Pyongyang aumentó sus pruebas con misiles y Seúl amplió sus maniobras militares con Estados Unidos en un círculo de represalias.
Durante la mayor parte de los 70 años transcurridos desde el final de la Guerra de Corea (1950-1953), la unificación ha sido un objetivo prioritario para los líderes de ambos países, que están divididos por la frontera más militarizada del mundo. Pero, según los observadores, las perspectivas de unificación a corto plazo entre el adinerado y democrático sur y el norte, socialista, autoritario y pobre, son muy escasas.