El viernes se registraron protestas en varias ciudades de Ecuador contra el gobierno de Daniel Noboa debido a los apagones, la inseguridad, la violencia criminal y la crisis económica, que los manifestantes atribuyen a la administración actual. Las movilizaciones más intensas ocurrieron en Quito, donde cientos de estudiantes universitarios, sindicatos y miembros de organizaciones sociales se manifestaron en el centro de la ciudad.
Las consignas eran claras: “Nos quitan la luz, encendemos las calles” y “No tenemos miedo”, mientras algunos carteles pedían que el presidente no se postulara para la reelección. La marcha comenzó en el parque El Ejido y avanzó hacia el centro histórico, donde los manifestantes se acercaron al palacio presidencial. Sin embargo, la zona estaba vallada y protegida por un fuerte despliegue policial, lo que impidió que los manifestantes llegaran a la Plaza Grande.
Durante la protesta, hubo altercados con la policía y se registraron imágenes de oficiales arrastrando a un participante de la marcha, mientras algunos quemaban llantas y coreaban “¡Fuera, Noboa, fuera!”. Aunque no se han reportado detenidos, los organizadores advirtieron que habrá nuevas movilizaciones.
En Guayaquil, la conmemoración de la matanza de trabajadores del 15 de noviembre de 1922 también fue una ocasión para rechazar las políticas del gobierno, especialmente la falta de presupuesto para educación y salud, además de los apagones. Las protestas reflejan el descontento generalizado hacia la administración de Noboa, que enfrenta crecientes críticas por la crisis que atraviesa el país.
