Tras los recientes hechos violentos en Chihuahua, donde 18 personas perdieron la vida el pasado viernes, las autoridades implementaron un operativo masivo en la región sur del estado, coordinado por las Bases de Operación Interinstitucional (BOI). Este despliegue involucra a la Agencia Estatal de Investigación (AEI), la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, con el objetivo de prevenir más delitos en municipios como Parral, Villa López, Matamoros y sus alrededores.
El operativo incluye patrullajes por tierra y apoyo aéreo mediante un helicóptero que ayuda a vigilar y buscar sospechosos desde el aire. Las fuerzas de seguridad se concentran en la detección de drogas, armas, vehículos robados y personas con órdenes de captura, en un esfuerzo para contrarrestar la violencia generada por disputas entre grupos del crimen organizado, específicamente entre facciones de «La Línea», lideradas por «El 04» y «El Menchaca».
La situación es especialmente tensa en Ojinaga, donde ocurrieron 11 de las 18 muertes, y donde los enfrentamientos entre grupos criminales se han intensificado. Las autoridades en Ciudad Juárez, ubicada en la frontera, están en alerta para evitar que la violencia se extienda hacia esa región.
Los operativos seguirán realizándose de manera continua y aleatoria, como parte de las estrategias de seguridad regional.