Ante el aumento de denuncias por agresiones con objetos punzocortantes dentro del Metro de la Ciudad de México, autoridades capitalinas han decidido intensificar las medidas de seguridad en el sistema de transporte. Para ello, se desplegarán policías encubiertos y usuarios simulados dentro de los vagones con el fin de detectar y prevenir incidentes.
Además del despliegue de los 5,800 elementos de la Policía Bancaria e Industrial que ya operan en el Metro, se incorporarán 200 efectivos adicionales pertenecientes a los agrupamientos Zorros y Panteras de la Policía Auxiliar, quienes patrullarán tanto estaciones como trenes.
El plan de reforzamiento también contempla la participación de 683 trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo (STC) y de Protección Civil, quienes contribuirán al monitoreo de las instalaciones. Asimismo, se utilizarán binomios caninos para la detección de sustancias ilícitas, se establecerán controles de acceso más estrictos y se realizarán revisiones aleatorias en los torniquetes.
Durante una conferencia en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, la fiscal general de Justicia de la Ciudad de México, Bertha Alcalde Luján, informó que hasta el momento se han registrado 41 denuncias por pinchazos: 33 ocurrieron dentro del Metro, cuatro en unidades del Metrobús, tres en espacios públicos y una más en el servicio Pumabús de Ciudad Universitaria.
Hasta la fecha se han efectuado tres detenciones relacionadas con estos hechos, aunque solo una persona permanece bajo prisión preventiva por el delito de robo agravado.