En las últimas semanas, las intensas lluvias han provocado severos daños en al menos 12 estados de la nación. Según un recuento, más de 130 municipios han sufrido consecuencias que van desde carreteras bloqueadas y comunidades aisladas hasta inundaciones, deslaves y ríos desbordados, resultando en la trágica pérdida de al menos 7 vidas.
Nuevo León ha experimentado tanto beneficios como perjuicios a causa de las lluvias. Cinco personas fallecieron durante el paso de la tormenta Alberto. Este martes, el estado declaró emergencia para solicitar recursos federales destinados a la reconstrucción y reparación en los 51 municipios afectados por inundaciones.
En la declaración publicada en el Periódico Oficial del Estado, se especifica que los daños afectan sectores como vivienda, educación, salud, infraestructura hidráulica y, principalmente, las zonas urbanas y carreteras.
El lunes, el gobernador Samuel García informó que los daños se estiman en mil millones de pesos.
Protección Civil de Yucatán informó que 35 municipios han sido afectados de diversas formas, con inundaciones más severas en la costa, el oriente, el sur y la zona conurbada de Mérida. La principal preocupación es la pérdida de cultivos; en Ixil, se reporta la destrucción total de hierbabuena y cilantro.
Los productores locales están alarmados por el impacto económico y la escasez de estas hierbas esenciales en los mercados del país.
