Miles de personas salieron este viernes a las calles en varias ciudades de Serbia en una huelga general convocada por el movimiento estudiantil, que lleva semanas bloqueando numerosas universidades en el país. La protesta busca expresar el malestar de los ciudadanos con la gestión del Gobierno populista de Aleksandar Vucic.
Bajo el lema de un «día de desobediencia civil», los estudiantes llamaron a no acudir al trabajo, a las clases ni cumplir con las tareas cotidianas, y alentaron a la población a «tomar la libertad en sus manos». La huelga está siendo seguida por diversos sectores, incluidos docentes, abogados, médicos, comerciantes, medios de comunicación opositores e instituciones culturales, según informó la televisión regional N1.
El origen de las protestas se remonta a noviembre, cuando estudiantes y otros sectores comenzaron a bloquear facultades y centros universitarios en respuesta al colapso del techo de una estación de trenes en Novi Sad el 1 de noviembre, que causó la muerte de 15 personas, solo cuatro meses después de su inauguración. Los manifestantes responsabilizan al Gobierno de corrupción endémica, especialmente en relación con la reconstrucción de la estación, llevada a cabo por empresas chinas. Exigen la publicación de toda la documentación sobre este proceso.