La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que el jitomate mexicano continuará exportándose a Estados Unidos, a pesar del arancel del 17% impuesto por ese país, al señalar que la demanda del producto no puede ser cubierta por ningún otro productor en el mundo.
Durante su conferencia matutina del miércoles 16 de julio, Sheinbaum subrayó que el jitomate nacional mantiene su lugar en el mercado estadounidense debido a su calidad y volumen, y que incluso con la nueva carga arancelaria, el país vecino no tiene una alternativa viable de abastecimiento.
Reconoció que el impacto del arancel puede afectar especialmente a los pequeños productores, aunque consideró que, en muchos casos, el costo adicional será absorbido por los consumidores estadounidenses. Por ello, anunció que ya se trabajan nuevas alternativas para apoyar al sector, las cuales serán detalladas próximamente por el titular de la Secretaría de Agricultura, Julio Berdegué.
Entre las opciones que se están contemplando, Sheinbaum mencionó el fortalecimiento del mercado interno y la posibilidad de abrir nuevos destinos de exportación, tanto para jitomate fresco como para su versión procesada, todo ello dentro del marco del llamado Plan México.