Donald Trump, durante su regreso a X (anteriormente Twitter), narró con detalles vívidos su reciente intento de asesinato. En una conversación con Elon Musk, propietario de la plataforma, Trump comentó que si no hubiera girado la cabeza, podría no estar hablando en ese momento. Musk, quien había sido crítico de Trump en el pasado, elogió la fortaleza del expresidente, destacando que su resistencia al atentado del mes pasado era crucial para la seguridad nacional.
En la conversación, Trump abordó temas como la inmigración ilegal y las regulaciones gubernamentales, usando la sesión para conectar directamente con millones de votantes. La reunión también buscaba reparar la imagen de X tras algunos problemas recientes y reflejaba la evolución de la relación entre Trump y Musk, que pasaron de ser rivales a aliados en el contexto electoral actual.