Unidades ucranianas enfrascadas en batallas callejeras contra las fuerzas del Kremlin en un importante poblado del noreste de Ucrania lograron parar el avance ruso, dijeron el jueves funcionarios militares de Kiev, aunque un funcionario ruso de alto nivel dijo que la ofensiva tiene suficientes recursos para seguir adelante.
Los intentos rusos de tomar Vovchansk, uno de los poblados más grandes en la zona de Járkiv en el noreste de Ucrania, con una población de preguerra de 17.000 habitantes, “han sido frustrados”, dijo la comandancia general ucraniana en un reporte que se emitió a mediodía.
No fue posible verificar el reporte de manera independiente.
Seis personas fueron heridas el jueves en un ataque ruso en pleno día contra Vovchansk usando municiones de racimo, dijeron funcionarios locales, mientras los cuerpos de rescate y voluntarios ayudaban a personas afectadas por el cañoneo. Entre los heridos había dos médicos.
Las autoridades ucranianas han evacuado a unos 8.000 civiles del poblado. La estrategia usual de los rusos es dejar en ruinas a pueblos y aldeas con ataques aéreos antes de la entrada de unidades.
Vovchansk, ubicada a apenas 5 kilómetros (3 millas) de la frontera con Rusia, ha sido muy afectada por los combates en días recientes. Rusia lanzó una ofensiva en la zona de Járkiv a fines de la semana pasada, aumentando la presión sobre las asediadas fuerzas ucranianas que están a la espera del envío de armas y municiones por parte de Occidente.
Rusia también ha estado probando otras defensas ucranianas a lo largo del frente de unos 1.000 kilómetros (620 millas) que va de norte a sur por el este de Ucrania. Esa línea apenas ha cambiado en los últimos 18 meses, en lo que se ha convertido en una guerra de desgaste. Los recientes ataques rusos han ocurrido en la región oriental de Donetsk, así como en las de Chernihiv y Sumy en el norte y Zaporiyia en el sur. El propósito parece ser desgastar a las atribuladas fuerzas ucranianas y explotar sus puntos débiles.
El principal oficial militar de la OTAN piensa que las fuerzas armadas rusas son incapaces de lograr un avance importante.
“Los rusos no tienen las cifras necesarias para lograr un avance estratégico; no lo creemos”, declaró a la prensa el general estadounidense Christopher Cavoli, comandante Supremo Aliado.